Los coches de GNC son coches híbridos de gasolina y Gas Natural Comprimido. Cuentan con la etiqueta ECO y con una serie de ventajas y desventajas que ahora veremos. El precio es menor que el del combustible tradicional pero lo que antes era una apuesta a futuro rentable, ahora se está convirtiendo en una inversión de dudosa rentabilidad. Te lo contamos todo en Romadrid ¡Toma nota!
¿Qué es un coche de GNC?
Un coche de GNC es un coche impulsado de manera conjunta por gasolina y gas. Suelen ser de metano, que es más ecológico y asequible económicamente que el resto de los carburantes convencionales. Junto a los coches de GLP, Gas Licuado de Petróleo, son unas de las alternativas que surgieron hace unos años como apuesta diferente a los combustibles tradicionales. En algunos casos, este gas se presenta licuado y se conoce como GNL, y se utiliza en vehículos pesados para largas distancias.
Desventajas de los coches de GNC
Una de las principales desventajas es que no hay una infraestructura suficiente todavía para acoger a tantos coches de GNC. No hay muchas gasineras que cuenten con surtidores de gas. Pese a que este tipo de coches cuenta con un pequeño depósito de gasolina, hay que tener en cuenta que la principal autonomía proviene del GNC y que no hay muchos sitios donde repostar. Por eso es importante planear los repostajes sobre todo en viajes largos.
Otro inconveniente es que el GNC es menos calórico que el diésel o la gasolina. Esto significa que, para recorrer una misma distancia, el Gas Natural Comprimido necesita alrededor de un 5% más de energía por lo que gasta un poco más de combustible y rinde algo peor. Es cierto que, conduciendo el coche, a efectos prácticos, es algo que no se llega a percibir mucho.
El precio de venta al público es más alto que un modelo equivalente de combustión. Es decir, un coche urbano con un precio de 18.000 euros podría costar en torno a 20.000 euros si está impulsado por GNC. Pasa lo mismo con los coches de GLP. A nivel de mantenimiento no hay grandes diferencias, pero los fabricantes recomiendan realizar las revisiones que indican en los libros de mantenimiento ya que el GNC a la larga es más corrosivo.
Ventajas de los coches de GNC
Una de las principales ventajas de los coches GNC es que se mueven con un combustible más ecológico y limpio que los combustibles tradicionales. Son tan limpios porque el resultado del proceso químico de combustión es una emisión de óxidos de nitrógeno y de dióxido de carbono muy baja.
Esto les permite obtener de distintivo medioambiental la etiqueta ECO de la DGT y circular así por las Zonas de Bajas Emisiones de las grandes ciudades. También son mucho más silenciosos. La ventaja de la etiqueta también les permite contar con tarifas reducidas en las zonas de aparcamiento de estacionamiento regulado.
Transformar coche de combustión a GNC
No es un proceso fácil ni económico, pero es posible hacerlo. En prácticamente todos los casos, los coches transformados a GNC son de gasolina ya que los de diésel requieren de un proceso muy laborioso, complicado y costoso. En los de gasolina sí es común ver algún vehículo transformado a gas, siempre y cuando cumplan con la normativa Euro3, es decir, los matriculados después del 2001 y que cuentan con la etiqueta B de la DGT.
El coste de este proceso puede costar entre 2.000 y 3.000 euros, pero todo depende de cada modelo y el tiempo de mano de obra empleado en el proceso. Después, el coche debe pasar la ITV y hay que modificar la ficha técnica para obtener la nueva etiqueta.
Precio GNC 2023
Hace varios años el precio del GNC era una de las principales ventajas de este combustible. Una apuesta económica. Las subidas del combustible en general, y en particular del GNC desde el 2021 al 2023, son del 130%. En Madrid, el coste del GNC en 2021 estaba en torno a los 0,84 €/kg. En 2023 el precio medio del GNC en Madrid está en torno al 1,43 €/kg mientras que la gasolina ronda el euro y medio.
Esto quiere decir que lo que antes era una apuesta mucho más rentable para el bolsillo por cada 100 km, ahora ya no tiene apenas beneficio. Teniendo en cuenta, además, como comentábamos, que el GNC es más calórico y nuestro coche de gas consumirá algo más que su homónimo de gasolina.