Las investigaciones en el mundo del motor están cada vez más enfocadas a la movilidad sostenible y respetuosa con el medio. Los coches de gas licuado de petróleo surgen de esa necesidad de ofrecer coches dinámicos, sin emitir gases contaminantes y con la máxima autonomía. En Romadrid contamos con un stock completo de vehículos entre los que se incluyen este sistema de circulación.
¿Cómo funcionan los coches GLP?
La marca Ford, disponible en Romadrid, incluye muchos vehículos con este tipo de sistema. Las variantes GLP combinan dos tanques se combustible: uno de ellos tradicional y otro con gas licuado de petróleo, pudiendo moverse utilizando dos combustibles. El gas licuado de petróleo está en estado líquido y se compone de butano, propano, polipropileno o butileno. Este combustible se almacena en un depósito que se sitúa habitualmente en el maletero. Cuando el coche está en marcha, un reductor regula la presión y convierte el líquido en gas hasta que llega a los cilindros.
Ventajas e inconvenientes de los coches GLP
Esta tecnología está muy vista en toda Europa, lo que ayuda a que todas las estaciones de repostar lo incluyan en sus opciones. Además de aportar gran autonomía al vehículo al tener un depósito extra junto al tradicional, el precio de este combustible es muy inferior que al de la gasolina o el diésel.
Con este tipo de vehículo puedes obtener la etiqueta ECO de la DGT, beneficiándote de las ventajas a la hora de pagar impuestos, acceder a zonas de alta contaminación, acceder a carriles VAO o incluso acceder a un aparcamiento en medio de la ciudad. Otro de los puntos a favor es que puede ofrecer hasta un 40% de ahorro en carburante, ya que utiliza ambos motores, alargando su vida.
En los coches GLP el mantenimiento es menor, ya que el desgaste del motor es mínimo. Aunque a priori los coches suelen ser más costosos, el repostaje es mucho más económico. Algunas dificultades que presenta este tipo de coches es que los coches GLP siempre necesitan gasolina y que en algunos lugares no hay tata variedad de boquillas como necesita tu vehículo. El último punto negativo a tener en cuenta es que el espacio dedicado a la rueda de repuesto está ocupado por el depósito.
¿Cómo está constituido el sistema de GLP?
El sistema de coches GLP facilita que la conducción sea mucho más suave y silenciosa en comparación con un vehículo de combustible tradicional. Al uso, tiene la mismas funciones que un coche de combustión tradicional, por lo que la conducción será igual.
Los principales componentes de un vehículo GLP son el depósito toroidal con forma de rueda, para no eliminar espacio del maletero; una boca de carga en el lateral del vehículo, mangueras y tuberías que se conectan con una válvula de corte; un reductor que pasa el líquido a estado gaseoso; una válvula de corte, que corta el caudal del gas cuando el motor se para o cuando el coche se está alimentando del combustible de gasolina.
Además de estas piezas, son esenciales otras como la centralita, que controla la dosis de gas que recibe el motor en todo momento; el conmutador, que es el encargado de seleccionar el modo de circulación. Es interesante señalar que cualquier coche puede convertirse en un GLP, siempre y cuando tengamos claro los pros y los contras de esta acción. El precio varía según la cilindrada y por eso siempre hay que recurrir a los expertos.
Cómo repostar un coche GLP en una gasolinera
Repostar un coche GLP es prácticamente igual que en un coche de combustión tradicional, ya que cualquier punto de repostaje está preparado para este tipo de vehículos. Hay algunas recomendaciones que hay que seguir cuando se hace un repostaje de GLP: en primer lugar, hay que parar junto al surtidor ya apagar el coche, es recomendable no utilizar el teléfono móvil ni fumar. Cuando vayas a retirar la boquilla adaptadora, comprueba que la junta está en buenas condiciones y apriétalo bien sin hacer excesiva fuerza. Recuerda que debes pulsar el botón de suministro durante todo el proceso, una medida que invita a estar pendiente del llenado. En este sistema, el llenado parará en un límite de seguridad, que tiene en cuenta por medio de la presión.
Cuando retires la manguera habrá una pequeña fuga de gas de una milésima de segundo, totalmente inofensiva y por la que se desaconseja estar fumando. Una vez cerrada la tapa del combustible, ya estarás listo para conducir tu vehículo sostenible. Si quieres informarte más sobre este tipo de vehículos, no dudes en preguntar a nuestros profesionales de Romadrid.